Todo lo que deberías saber antes de regalar un móvil a tu hijo esta Navidad

Domingo 22 de Diciembre del 2019

Los expertos dicen de que la edad adecuada depende de la madurez de cada niño, pero la sitúan más cerca de los 16 que de los 12

Todo lo que deberías saber antes de regalar un móvil a tu hijo esta NavidadMuchos niños piden un móvil como regalo de Navidad, y conviene hacer algunas reflexiones antes de satisfacer su deseo (eli_asenova / Getty Images/iStockphoto)

La Navidad está a la vuelta de la esquina y muchas familias aprovecharán estos días de compras y preparativos para adquirir el primer teléfono móvil de sus hijos. Se calcula que el 25% de los niños españoles ya tiene un móvil propio a los diez años, mientras que casi el 75% lo tiene a los doce y más del 90% a los quince años. ¿Cómo decidir cuál es la edad adecuada para hacerlo?

Algunos estudios empiezan a advertir de los efectos de las pantallas en el desarrollo cerebral de los niños. Un informe reciente de Common Sense Media, por ejemplo, asegura que los chavales de entre 0 y 8 años pasan una media de dos horas y diecinueve minutos frente a una pantalla, y que el 35% de ese tiempo lo pasan con teléfonos móviles.

A pesar del criterio de los expertos, tres cada cuatro niños ya tienen móvil propio a los doce años

A pesar del criterio de los expertos, tres cada cuatro niños ya tienen móvil propio a los doce años (JackF / Getty Images/iStockphoto)

El gesto aparentemente inocente de poner los dibujos en el móvil para que el niño se entretenga mientras desayuna, o de prestárselo para que se entretenga con algún juego, si se repite a diario, podría no ser tan inocuo como parece, pues un nuevo estudio realizado en Hospital Infantil de Cincinatti y publicado por la revista JAMA Pediatrics ha concluido que, a más tiempo de pantalla, menor desarrollo cerebral.

Los investigadores examinaron los cerebros de 47 niños de entre 3 y 5 años utilizando resonancias magnéticas y descubrieron que los niños que pasaban más de una hora al día de pantalla sin supervisión parental presentaban niveles inferiores de desarrollo de materia blanca, crucial para desarrollar habilidades cognitivas. Estos niños también dieron resultados peores en un test que probaba sus habilidades nombrando objetos y, en general, presentaron un nivel expresivo y de lenguaje más pobre que los que tenían menos contacto con teléfonos o tabletas.

Investigación con niños de 3-5 años

A más tiempo de pantalla, menos materia blanca y menos habilidades cognitivas

Todavía faltan investigaciones acerca de los efectos de las pantallas en otras edades, pero otro estudio reciente elaborado por Wiko señala que casi la mitad de los jóvenes españoles abre un perfil en redes sociales antes de los catorce años, y uno de cada cinco lo hacen a los doce años. Un hecho llamativo, ya que la normativa de algunas redes sociales como Instagram o Facebook establecen los catorce años como edad mínima para registrarse en sus comunidades −la propia legislación española establece el límite para poder abrirse un perfil social sin consentimiento de los padres en los catorce años de edad−, mientras que los niños de trece años pueden abrir una cuenta en Twitter con consentimiento paterno y en YouTube incluso sin él.

Sin embargo, algunos expertos alertan de que la edad recomendada para tener teléfono móvil es a los dieciséis años, algo a tener en cuenta si estamos pensando en regalar un aparato a nuestro hijo en estas fiestas.

Dejar el móvil a los bebés para que se entretengan podría no ser inocuo, a juzgar por las últimas investigaciones

Dejar el móvil a los bebés para que se entretengan podría no ser inocuo, a juzgar por las últimas investigaciones (EllenaZ / Getty Images/iStockphoto)

¿Cómo tomar la decisión?

La madurez, la autonomía, la personalidad... cuentan

Gabriela Paoli, psicóloga y experta en adicciones tecnológicas, afirma que una de las preguntas más frecuentes que se hacen las familias es a qué edad los hijos pueden tener su primer teléfono móvil. “La respuesta no es sencilla”, explica, “pues no todos los niños están preparados para hacer las mismas cosas al mismo tiempo. Sin embargo, no creo conveniente regalar un móvil a un niño de once o doce años. Seguramente hay otras alternativas como pueden ser libros, juguetes, instrumentos de música, bicicleta, patines, etcétera, que con probabilidad serán opciones más adecuadas”.

Paoli señala que la edad a la que los expertos recomiendan tener un móvil propio es a los dieciséis años, aunque “las cifras en España muestran que esa recomendación está lejos de cumplirse, ya que los últimos estudios nos dicen que a los 12 años casi el 75% ya tienen su primer móvil”. La edad es un criterio importante a tener en cuenta, según esta experta, pero también es importante ver en qué momento se encuentra nuestro hijo, su grado de madurez, el nivel de autonomía que tiene frente a los estudios o a su deporte, su personalidad, sus hábitos… Todo esto nos dará pistas, según Paoli, sobre si es o no el momento adecuado. “Sin olvidar que cada hijo es único”, matiza.

“No creo conveniente regalar un móvil a un niño de 11 o 12 años”

Gabriela Paoli Psicóloga y experta en adicciones tecnológicas

También es importante que los padres tengan claro cuáles son sus prioridades. “Hoy en día, educar, es educar en tecnología”, asegura esta psicóloga. “Por otro lado, debe ser una decisión meditada, pensada y sobre todo, consensuada por ambos progenitores, con el fin de evitar luego tensiones y discusiones entre ellos. Discernir si, realmente, el hijo está preparado para ello es cuestión de ambos”dice.

Y explica que “debemos ser conscientes que hay que acompañarlos en su proceso de iniciación digital y, sobre todo, tener claro que estos dispositivos son altamente adictivos porque introducen al niño o adolescente en un circuito de recompensa digital a través de la producción de un neurotransmisor, la dopamina, también conocido como la hormona del placer o la hormona de la felicidad. Los estímulos que reciben a través de la pantalla cuando juegan a videojuegos, o cuando hablan con los amigos por el WhatsApp, hacen que su cuerpo produzca dopamina, lo que les genera una sensación placentera y les empuja a volver una y otra vez a la pantalla en busca de esa sensación”.

Antes de entregar un móvil a un niño o adolescente hemos de ser conscientes de que estos dispositivos son muy adictivos

Antes de entregar un móvil a un niño o adolescente hemos de ser conscientes de que estos dispositivos son muy adictivos (doble-d / Getty Images/iStockphoto)

Muchas veces los padres acaban por comprarle el teléfono al niño para evitar la queja constante, el “¡pero si todos mis amigos ya lo tienen!”. Sobre esta presión, Gabriela Paoli advierte que es muy habitual caer en la comparación, tanto por parte de los padres como de los hijos. “Lo cierto es que se suele caer mucho en ello: `Es que tu amigo Pedro es mucho más responsable que tú y le va mucho mejor que a ti en los estudios’; y también en los absolutismos –‘en esta casa mando yo’–”, dice.

Destaca que es “interesante dialogar sobre este tema con ellos, y hacer de la situación una oportunidad para reflexionar sobre cómo es tu hijo, hacerle reflexionar a él sobre cómo cuida su material de estudio, su ropa de entreno, sus juegos o juguetes…Y así, dialogando, hacerle llegar a una conclusión, es decir, que sea él mismo el que reflexione acerca de si está preparado para cuidar y hacer un uso correcto del móvil. En pocas palabras, convertir el problema (no tener un móvil) en una oportunidad de diálogo, hacerle pensar y tomar conciencia de forma guiada de la forma más respetuosa y cercana para él”.

Y si al final decides regalárselo...

Si finalmente uno decide que sí regalará el móvil, ¿cómo podemos prepararnos para la entrega? ¿Qué aspectos hay que tener en cuenta? Para esta psicóloga experta en adicciones tecnológicas, es conveniente tener en cuenta ciertas premisas.

En primer lugar, que quienes entreguen a los hijos el primer móvil sean los padres, y no un familiar o un amigo. “De ellos será toda la responsabilidad de un uso correcto, y por ello, ellos deben ser quienes se lo darán al hijo”, asegura.

Si al final decides regalárselo...

Antes de la llegada de un móvil propio también será bueno acercar paulatinamente a nuestros hijos a la tecnología, explicarle cuáles deberían ser sus prioridades vitales, y hablar con ellos de la responsabilidad que están adquiriendo. “Hay que tener claro que no se trata de entregar el dispositivo y listo, sino que previamente se debe pactar una serie de cuestiones”. Algunas de ellas son, en opinión de esta experta, las siguientes:

1. Habla con tu hijo de la responsabilidad que está adquiriendo.

2. Infórmale de los riesgos y peligros de internet. “Para ello suelo recomendar utilizar vídeos cortos como disparadores para reflexionar; hay muchos por las redes”.

3. Los padres deben elegir un móvil adecuado para su edad y uso. Y pactar el tipo de contrato, controla su consumo de datos.

4. Configura con ellos el móvil para que sea un dispositivo seguro. Utilizar aplicaciones de control parental, configurar junto a ellos para que sepan a qué contenido pueden acceder y a cuál no y por qué.

5. Bajar e instalar las aplicaciones juntos.

6. Acordar y pactar tiempo y lugar de uso del móvil. “Para evitar que se convierta en conflicto diario o en moneda de cambio, recomiendo firmar un contrato, firmado por ambas partes, y dejarlo en un lugar visible de la casa, a modo de recordatorio”.

7. Dejar claro cuáles deben ser sus prioridades en cada momento. “Primero el deber y luego el placer”, afirma Paoli.

8. Hacerles entender que, aunque sea suyo, el móvil no es privado. Los padres somos responsables legales del menor, y por ello debemos tener acceso al teléfono, ya que las responsabilidades de un posible mal uso van a repercutir en nosotros.

9. Promover la empatía digital y la comunicación respetuosa: el chico o la chica debe cuidar la comunicación y el vocabulario que utiliza, las imágenes que comparte, etcétera. Debemos hacerle reflexionar acerca de lo que está bien y mal en la vida real, y extrapolarlo a la vida virtual.

10. Reflexionar sobre la privacidad, la intimidad y el respeto. Es fundamental hablar de los valores que hay en casa.

Es importante configurar el móvil y las aplicaciones conjuntamente, y hablar de las responsabilidades

Es importante configurar el móvil y las aplicaciones conjuntamente, y hablar de las responsabilidades (Tom Merton / Getty Images)

Y, como en otros asuntos, advierten los expertos, lo más importante es predicar con el ejemplo: “Los niños observan constantemente a sus padres, son su modelo a seguir en todos los aspectos. Por eso, si los padres viven conectados a sus pantallas, los niños no entenderán por qué ellos no pueden hacerlo. Muchas veces este punto nos hace parar y pensar en lo que estamos haciendo nosotros, los adultos de la casa. Y frente a esto, no hay excusa. Recomiendo, en la medida de lo posible, llegar a casa y utilizar el modo avión, para dar el mensaje claro a nuestros hijos y a nuestra pareja de que lo más importante son ellos. Debemos desconectarnos de nuestras propias pantallas para poder conectarnos con ellos”, aconseja Paoli.

También es fundamental no tener miedo a la tecnología: “En muchas ocasiones sentimos que ellos saben o conocen más cosas de este mundo que nosotros. Es importante no quedarse fuera, hacer el salto conjuntamente y evitar que se produzca la brecha digital. Se trata de iniciar este proceso juntos, de enseñarles e incluso de aprender todos sobre los temas que tanto le interesan o atraen a tu hijo. Ver el lado positivo y beneficioso de la red. Siempre les digo a los padres que puede ser una gran herramienta para conocer aún más a tu hijo, para acercarte a él. Es decir, conectar con sus intereses, sus hobbies, sus miedos, sus fantasías”.

La fórmula de éxito

Normas + diálogo + cariño + ejemplo

La última recomendación de Paoli es aplicar una fórmula infalible para afrontar, no solo este, sino cualquier reto de crianza al que nos enfrentemos: “La fórmula sería Normas + Diálogo + Cariño + Ejemplo. Los límites ayudan a los hijos a crecer en virtudes y valores, proporcionan seguridad y ayudan a fomentar la tolerancia a la frustración, que es aceptar con naturalidad que no siempre se puede obtener lo que se desea en la vida”.

Admite que pueden ser muchos los padres que piensen que “intentar dialogar y razonar con los hijos cae en saco roto y que no se obtiene un resultado. Sin embargo, existe la obligación de mantenerlo, además de la responsabilidad. Al final, sin duda, el mensaje irá calando”.

El primer móvil deben entregarlo los padres, no un familiar o amigo

Fuente: http://ow.ly/BR0K30q49ss